El pasado sábado 28 de Abril tuvo lugar la 4ª de las formaciones mensuales previstas en el Programa de Membresía 2018 de JJC. En un ambiente distendido y cordial, de gran conexión entre público y ponentes (facilitado por tratarse de un acto de pequeño formato solo accesible a personas asociadas a JJC o al ISMA o que hubieran realizado reserva previa), el Vicepresidente del Instituto de Salud Mental de la Abogacía, ex Abogado de Uría Menéndez (2015-18), y actualmente abogado por cuenta propia trató algunos de los mitos y lugares comunes más relevantes para aquellos jóvenes juristas con inquietudes y talento que buscan comenzar su carrera profesional:
¿Cómo se accede a un gran despacho así? ¿Yo podría? ¿Qué tal son los horarios? ¿Se aprende mucho? ¿Es para todo el mundo el trabajo en una gran firma? ¿Qué es lo mejor y lo peor que sacas de tu experiencia?
Su enorme sinceridad y tacto, su vocación profesional y compromiso con la verdad, dieron por resultado una conferencia enormemente motivadora para los asistentes, donde no se dieron respuestas de blanco o negro sino que se trató en todo momento de iluminar un poco los distintos caminos que un joven jurista puede emprender al comenzar su andadura profesional.
Tampoco pudo faltar la presentación del ISMA: La primera entidad en España en velar por la salud y bienestar de los profesionales y estudiantes del Derecho que, siguiendo la estela de éxito de instituciones similares del mundo anglosajón, lucha por visibilizar la problemática de la salud mental en el ámbito del derecho, desestigmatizando las patologías (que, en palabras de su Presidente y Fundador Manel Atserias “en el mundo anglosajón no se ven ya como una debilidad, sino como un valor añadido de resiliencia”) y estableciendo medidas de prevención y evaluación que mejoren el bienestar de los juristas, buscando su implementación en toda la profesión jurídica.
" [las patologías mentales] en el mundo anglosajón no se ven ya como una debilidad, sino como un valor añadido que demuestra resiliencia”
- Manel Atserias, Cofundador y Presidente del ISMA
La estructura de la jornada, que comenzó y acabó con un networking informal y ronda de preguntas/mesa redonda entre ponentes y público, tuvo por resultado que, pese a sus cuatro horas de duración, ninguno de los asistentes declaró se le hubiera hecho larga, argumentaron, por ser
“muy distinta a otras clases a las que estamos acostumbrados/as"
¿No pudiste venir? ¡No hay problema!